Kaizen, o cómo vencer la pereza
Si leíste Ikigai, ya sabrás de mi gusto por las evocadoras expresiones japonesas, intraducibles muchas veces al castellano o a cualquier otra lengua occidental. Hace poco cuando me replanteaba mi manera de organizarme para poder llevar a cabo un proyecto que he pensado durante años -pero que no ha dejado de ser más que una entelequia, apoyándome en la universal excusa de la falta de tiempo- topé con el término Kaizen. KAI